El cómo administrar su dinero sin tarjetas de crédito es simplemente una cuestión de vivir dentro de sus medios. Aunque suena simple, puede ser un poco difícil cuando es el primero que realiza el cambio. La meta, sin embargo, es no gastar más dinero de lo que realmente gana en un marco de tiempo determinado. Apegarse a vivir dentro de sus medios se puede lograr haciendo y siguiendo un presupuesto, y luego pagando todos sus artículos con dinero en efectivo, cheques, pagos automáticos bancarios y tarjetas de débito.
Presupuesto
El primer paso más importante es averiguar cuánto dinero ingresa y cuánto dinero gasta cada mes. Los presupuestos se pueden hacer sobre la base de períodos de pago, pero son más fáciles de manejar cuando se crean mensualmente ya que, por lo general, la frecuencia de las facturas de la mayoría de los hogares se realiza de forma mensual.
Un presupuesto adecuado no asignará más dinero saliente que dinero entrante. En otras palabras, si usted gana € 3.000 por mes, el presupuesto de gasto de los hogares debe permitir no más de € 3,000 cada mes. Todo el presupuesto debe tener en cuenta los pagos ocasionales, tales como el seguro anual y los impuestos de propiedad, los regalos de navidad, de cumpleaños y los fondos de emergencia para reparaciones de automóviles o para modificaciones del hogar.
Si actualmente gasta más dinero de lo que gana cada mes, usted tendrá que reducir o eliminar sus gastos en una o más áreas. Es muy importante hacer un presupuesto sobre la base de los ingresos efectivos solamente. Las tarjetas de crédito no son una forma de renta y nunca deben ser incluidos como tales en el presupuesto del hogar.
Efectivo y cheques
Vivir sin tarjetas de crédito significa gastar solamente lo que usted realmente tiene. Una de las maneras más fáciles de forzar esto es mediante el uso de una técnica antigua pero eficaz que se conoce como técnicas de presupuestos.
Estas técnicas de presupuesto se definen como sistemas de sobres etiquetados con dinero en efectivo en ellas. Etiquete los sobres para una categoría de presupuesto dado, por ejemplo, la gasolina, la comida, el entretenimiento, entre otras. Luego agregue a cada una de estas el dinero suficiente para pagar de forma efectiva lo que debe.
Si su presupuesto le permite dar € 200 por mes para el gas y le pagan semanalmente, podrá agregar € 50 al sobre correspondiente cada semana. Cuando llegue el momento de comprar gas, abra el sobre y pague con el dinero que se encuentra ahí. Resista la tentación de agarrar el dinero de los sobres ya que una vez que el dinero haya desaparecido por completo, no se les permite gastar más en esa categoría presupuestaria hasta un nuevo mes o hasta otro período presupuestario.
Un enfoque similar se puede utilizar con el registro de la chequera, pero no siempre es tan eficaz. En lugar del manejo de efectivo, se escriben las cantidades presupuestadas y las categorías en su registro de cheques, luego realice un cheque por cada categoría escrita de la categoría presupuestaria específica y pague con ese dinero.
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