Las tarjetas de crédito con devolución en efectivo están ganando terreno como una de las opciones más populares entre los consumidores. No es casualidad: ofrecen una forma sencilla de obtener beneficios tangibles por tus compras cotidianas, algo especialmente atractivo en un contexto de inflación y precios altos.
Las entidades financieras han entendido que, para fidelizar a los clientes, tienen que ofrecer incentivos reales. Por eso, muchas tarjetas ahora devuelven un porcentaje de tus gastos en forma de dinero o crédito en tu cuenta. Aunque puede parecer un beneficio directo, no todas estas tarjetas son iguales, y ahí está la clave.
Porcentaje de devolución
Primero, debes fijarte en el porcentaje de devolución. Mientras algunas tarjetas te ofrecen un 1%, otras pueden llegar al 5% en categorías concretas como supermercados, gasolina o suscripciones digitales. Sin embargo, hay un detalle que pocos consideran: los límites de devolución mensual o anual. Aunque tengas una tarjeta que ofrezca un 3%, puede estar limitada a un máximo de 50 € al mes, lo que podría no ser tan atractivo si tienes un gasto elevado.
Otro factor importante es si la tarjeta tiene una cuota anual. Algunas tarjetas premium ofrecen devoluciones más altas, pero cobran cuotas de 100 € o más. En estos casos, el truco está en calcular si el ahorro que generas con la devolución compensa ese coste anual.
En España, tarjetas como la Cepsa Porque Tú Vuelves o la American Express Cashback lideran este segmento, pero también están surgiendo opciones interesantes de bancos digitales como N26 y Revolut. Este último, por ejemplo, combina la devolución con un sistema de cashback dinámico que varía según las tiendas asociadas.
No obstante, un detalle que no debes olvidar es cómo estas tarjetas afectan tu comportamiento de gasto. La devolución en efectivo puede tentarte a gastar más de lo necesario para «aprovechar» el beneficio. Aquí es donde entra la importancia de la educación financiera: utiliza la tarjeta como un medio de pago, no como una herramienta para acceder a dinero extra que no tienes.
En conclusión, las tarjetas de crédito con devolución en efectivo son una excelente opción para 2025, pero solo si eliges la que mejor se adapta a tus hábitos de consumo y la utilizas con cabeza.
